lunes, 25 de enero de 2010

PEDRO

Pedro llegó a mi vida como una sorpresa,
uno de los tantos días de verano,
nada mas común que ir de compras al supermercado,
estaba sentado fuera como esperando a alguien,
demasiado bello como para no notarlo.

Pasó bastante tiempo mientras compraba,
y el seguía afuera cuando salí, alguien lo acariciaba y me comenta
-Hace varios días esta solo en la calle-
sus ojos no se equivocaron y los mios tampoco, me esperaba,
decidí traerlo a casa y hacerlo mío.

Ya de esto casi un año ha pasado,
Pedro es casi un hijo, un amigo que estaba buscando hogar,
mi casa es su casa, y me regala su cariño desde ese día,
si bien muchos piensan -Es solo un perro-
Para mi no es así tiene un lugar en mi corazón que hace mucho tiempo
lo esperaba, me divierto con sus locuras.

Dicen que las mascotas se parecen a sus amos,
pero definitivamente tímido no es,
debía dejar por escrito esta historia real,
Perro Pedro es una de las cosas más bellas que me pasó el año pasado,
sigue conmigo, porque en un momento nos conocimos,
y creció un amor que no necesita palabras.

Aunque a veces siento que me habla.

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