QUE SABES TÚ...

Escuchando a la gran Olga Guillot se detuvo a pensar,
cómo sería su vida si buscara a ese hombre y le dijera en la cara algunas verdades,
si se transformara en esa mujer firme que imagina ser,
ir a su trabajo, presentarse arreglada, perfumada, impecable
y decirle que es realmente falto carácter y de imaginación,
decirle con esta boca que le hizo las cosas más insólitas en momentos de pasión voraz,
que puede meterse sus ideas retrógradas por dónde mejor le parezca.

Piensa, Cómo es un cavernícola querrá agarrarme del brazo,
porque siempre ha tenido fuerza,
lo que me dejaría muy cerca de su boca la que bebió de mi en los rincones mas sensibles,
dejaría que sintiera mi perfume que siempre lo trastornó,
trataría de zafarme de sus brazos,
y grande sería su sorpresa cuando le diga que no sólo con el he tenido buenos orgasmos,
sería un golpe devastador, pero certero en su orgullo de macho,

Vería ira en sus ojos, lo que me daría un placer enorme,
quizás el triunfo embriaga y deseo venganza,
dicen que no es un sentimiento noble,
pero qué importa antes de seguir abrigando sueños inútiles.
Mirarlo de igual a igual, sin dolor,
acabar con la imagen de mujer que espera eternamente.
Que se entere que es posible una vida sin el.

Dejarlo solo tratando de explicar a los demás semejante escena,
dejar sonar mi celular cuando me llame para tratar de arreglar el desastre,
saborear el poder sobre su desconcierto...